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domingo, 11 de marzo de 2012

Tu

Ací hauria d'anar l'entrada.  Eixa entrada que no vull que lligques. Però, em pare a pensar (més encara del que ho estic fent, m'és innevitable), i no sé si vull escriure.

Quin sentit té fer-ho si no vull que ningú ho lligca? Quin sentit té alliberar lletres per tu?

No té sentit malgastar paraules, i ja ho hem fet massa.

T'has quedat una de les poques coses que encara conservava: les ganes i el gust per escriure.

viernes, 27 de agosto de 2010

"Je te rêve encore, ce soir, dans ma chair".

Le doy al play. La música suena. Me tumbo en la cama. Cierro los ojos .............


Te veo. Estas a mi lado. Estamos tumbados en la arena, en la arena clara de una playa desierta. Oye, escucha, la música también te llega a ti. ¿Lo ves?

Encore, reste encore

No sé por que estamos en la playa, a mí no me gusta. No. Cambiemos.

Je te rêve encore, je t'aime.

Estamos en una plaza, en una gran plaza de una gran capital, rodeados de edificios neoclásicos. Hay más gente, pero la plaza es tan grande, que nos sentimos totalmente libres, anónimos, dos puntos entre la gente de la gran ciudad. Cógeme la mano, tira de mí. Ríete. Pero ya he andado mucho por aquí. Cambiemos.


¡Subamos 19 pisos! ¿Te atreves? y pese al frio de los barrotes de hierro, siento tu calor, el de tus abrazos, y la calidez de tu sonrisa. Todo es precioso, y se nos hace corto. Y decidimos subir 19 pisos más.
El río que divide la ciudad en dos, Les Champs, la cúpula dorada, el tejado verde... la ciudad.

Allez, allez, rentrons chez nous

Y abro los ojos, y no estás, y los 40ºC me vuelven a saludar. Se acabó el viajar.





lunes, 23 de agosto de 2010

No soy como tú

Sí, hoy también he soñado. Pero en este sueño ya no has salido tú. Ahora sale él. Él, él que se ha preocupado por mí. Él, él que ha estado siempre ahí. Él, él que siempre me ha cubierto la espalda, e iba recogiendo los pedazos que yo dejaba tras de mí. Pedazos de mi alma, pedazos de mis ojos, pedazos de mis sonrisas... pedazos de mí.

Por que él ha hecho todo eso mientras tú lo provocabas y ni te inmutabas... Por que para ti todo son perfiles, de tanto mirar hacia otro lado. Sigue así, cada vez verás menos.

Ahora he aprendido, he visto las señales y lo tengo claro. Pero recuerda: la última vez que hablamos fui yo la que te pregunté cómo estabas. Yo no soy como tú, que todavía no lo has hecho. Date prisa, no sea que lo hagas demasiado tarde.

Él merece salir en mis sueños. Tú, ya no.


El placer de dormirse...
El placer de despertarse...
¿Qué haríamos si no durmiéramos?